No son los palos que te da la naturaleza los que más duelen; si no... los que te dan gratuitamente esos cuerpos vacíos y sin alma que caminan entre nosotros cada día.
La vida es dura y te golpea; pero más duro son los golpes del propio ser humano.
Aún así es bonito seguir pensando que queda bondad en este mundo.
No permitas que te corten las alas y consérvalas siempre blancas
No permitas que te corten las alas y consérvalas siempre blancas